Amiga, esta palabra me queda corta. Porque en el poco tiempo
que te conocí fuiste mas que eso. A QUIEN VOY A ENGAÑAR, YO NO QUERÍA SER AMIGA
DE NADIE, NO BUSCABA UNA FACU AMIGA, NI NADA DE ESO, YO SOLO QUERÍA APROBAR, QUERÍA ESTUDIAR. Para mi la entrada a la
facultad era una cuestión meramente estudiantil, que si pegaba onda con alguno,
genial, pero si no, no me iba a mover el pelo. ¿Es que acaso el objetivo de la
facultad no es una institución que te enseña y te forma como profesional? ¿Qué
es eso de las amistades? ¿De los vínculos profesor-alumno? Nah, eso es puro
relleno, que gente con suerte puede llegar a conseguirlo. Hay dos escenarios
predominantes y opuestos: opción A) te juntas con gente buena onda pero que no
le preocupa aprender y aprobar, tan solo charlar sobre la vida mientras tiene
una cerveza en la mano. Opción B) Te rodeas con gente que te ayuda con la
facultad pero no tiene intenciones de saber ni como estas fuera de lo que
conlleva a una vida extra facultativo.
Te quieren ver bien, pero no mejor que ellos, decía mi vieja.
Jamás pensé que incluía a los amigos también.
Amiga, te considere mi amiga, tal vez demasiado temprano, nos
conocíamos hace 8 meses, después de batallar la tortuosa situación del ingreso. Fue que entre lágrimas, ira,
desesperaciones, victorias y derrotas llegamos a formar un vínculo del cual
alardeábamos iba a ser eterno. Llevábamos 4 meses de la amistad y ya planeábamos
a cuales materias nos inscribiríamos juntas, con que profesores y que horarios. Conocí a tu familia de manera
virtual y vos a la mía. Y pesar de que era una extensa red de internet lo que
nos separaba, no había nada más sólido como lo nuestro. O eso pensaba.
Pero amiga no es la que lastima, no es la que le das igual, o
la que no le importa los sacrificios que hagas, ni mucho menos es la que
siempre va a querer estar un paso adelante. La amistad no es egoísta, la
amistad es empatía y compartir, como los nenes de jardín, cuando uno pierde un
lápiz de color y al otro no le importa quedarse sin pintar y se lo cede a ese
compañerito. La amistad es alegrarse porque a ese amigo le vaya bien a pesar de
que a vos te haya ido mal. La amistad es sinceridad, es saber que podes hablar
con esa persona de frente y con la verdad, y ella no te va juzgar, ni te va a
odiar, al contrario, se van a comunicar de una manera sensata, madura y no
problematica. Amiga es la que reconoce sus errores y sabe pedir perdón, porque
se sobreentiende que una amistad es mas valiosa que el orgullo. A una amiga la
queres, sea la mas inteligente del salón, o sea la que peor le vaya. Porque se
supone que la elegiste, entre tantas te topaste con ella e hiciste click, tal
vez porque compartían historias de vida, o tal vez porque estuvo ahí cuando
nadie mas lo estuvo. Mi amiga no me recriminaría, o me discriminaria, o seria
una persona que todo el tiempo esta tirando comentarios malos, comentarios
venenosos y que siempre busca salir triunfante a pesar de todo, o de todos, o
de mi.
Me dolió en el alma, te lo juro, y no fue lo que paso lo que
me hizo romper en llanto, fue lo que hiciste, y porque eras amiga sigo sin entender porque lo hiciste. Pense que yo
también era tu amiga, pensé que me quería ver bien, y que mis logros eran los
tuyos.
Te explique lo que me dolió, y en vez de asumir la realidad,
preferiste hacerte la victima como tantas veces. Te cansaste de mandarte
cagadas y que yo te las hiciera saber, y yo me canse de perdonarte todas y cada
una de ellas y fingir que estaba bien que mi amiga actuara como mi contrincante.
Nunca me gusto la competitividad, la mala competitividad, esas donde la persona
se desconoce y actúa de maneras tan feas y hace lo que sea por ser el mejor, sin
importar quien dañe atrás. Nunca me sentí cómoda con la gente que se
aprovechaba de la buena voluntad de otro, o de la mía. Nunca me gusto la gente
soberbia, altanera y que solo mira para si mismo y su propio beneficio.
Me despediste y me deseaste buena vida.
Te deseo el mayor de
los éxitos, amiga, que puedas tener el resto de los años de la carrera
satisfactorios y que encuentres a alguien que sea capaz de soportar tu
altanería, que soporte que no te importe nada mas que vos misma. Yo me quedo
con la conciencia tranquila, y se que muy dentro de vos sabes lo que hiciste.
Pero yo di todo de mi por esta relación, y cerré heridas que no me
correspondía. Suerte amiga, y que encuentres a alguien que sea igual de amiga
que vos.